Foto tomada de RCN |
El día de ayer fue secuestrado y desparecido de la ciudad de Bogotá un ciudadano venezolano, el ciudadano luego apareció detenido por migración Colombia quien procedió a expulsarlo del país por asuntos de "seguridad nacional".
Migración a cargo de su director, Christian Krüger, como el apellido de la famosa película y serie de terror "Pesadilla en la calle Elm", que se aparece en los sueños de los habitantes de esa calle y los asesina, Krüger quiere convertirse en el terror de los venezolanos que atentan contra la seguridad nacional de Colombia, así lo confirmó al firmar un acto administrativo con el cual expulsa al funcionario de la embajada venezolana Carlos Manuel Pino García, diciendo que tiene en su poder medios de pruebas de la inteligencia (no especificó cual), que corroboran la peligrosidad de Carlos Pino para Colombia (el único antecedente de Pino es que fue detenido por las FF.MM. colombianas en 1999 en un territorio controlado por las FARC-EP en la época de los diálogos de paz cuando se creó la zona de distensión del gobierno Pastrana, en esa época el gobierno venezolano pidió su liberación y entrega) y él bajo las facultades que le otorga la ley procede unilateralmente a expulsarlo del país y prohibir su regreso por 10 años.
Carlos Manuel Pino García, detenido en Migración Colombia (Foto tomada de RCN) |
Krüger, ha tomado esta decisión en tiempo récord, violando el debido proceso de un ciudadano extranjero quien además está casado hace varios años con una excongresista colombiana por el PDA (Gloria Inés Florez) y exsecretaria de gobierno (2014-15) de la alcaldía de Petro en Bogotá, estando residenciado en Colombia por casi 19 años, Krüger ha prevaricado, violado el derecho de residencia, de la unidad familiar, del derecho de decidir el domicilio, y además ha avalado el procedimiento de secuestro y desaparición del ciudadano venezolano Carlos Pino, quien según las declaraciones de Krüger era seguido en todos sus movimientos desde hace vario tiempo y su captura obedeció a un plan elaborado y no a un accidente como lo creyó en un principio el ciudadano venezolano, la treta u operación encubierta consistió en hacerlo salir de un restaurante donde había mucha gente y podía haber resistencia, hacia un lugar controlado por los agentes encubiertos, usando como excusa el supuesto mal parqueo de su vehículo, el ciudadano sale del restaurante para mostrar los papeles del vehículo e identificarse como funcionario de la embajada venezolana, una vez es plenamente confirmada la identidad del objetivo es sometido y secuestrado por los policiales (recuérdese que gran parte de los agentes de la Popol, o policía política colombiana llamada DAS pasó a Migración Colombia), alegando que su estadía en Colombia era irregular, para esto contaron siempre con la comunicación de migración Colombia, que avalaría la captura diciendo que el ciudadano presentaba un riesgo para la seguridad nacional, debido a que Colombia cada vez es mas un país presidencialista donde se le está dando poder excesivo a la rama ejecutiva (llamada también administrativa o administración), de manera que el director de migración alega que no debe seguirle ningún debido proceso al ciudadano venezolano ni presentarlo ante los jueces de la República sino que él tiene el poder de juzgarlo sumariamente, obviamente esto esto es un error y un prevaricato del funcionario, pero envalentonados con que iniciamos un nuevo régimen mas presidencialista, mas dictatorial creen que pueden hacerlo pasando por encima de las demás ramas del poder:
"La medida, que fue impuesta por la autoridad migratoria de forma discrecional, está basada en el Artículo 2.2.1.13.2.2 del Decreto 1067 de 2015, el cual establece; "...el Director de la Unidad Administrativa Especial Migración Colombia, o sus delegados, podrán expulsar a los extranjeros que a juicio de la autoridad migratoria, realicen actividades que atenten contra la seguridad nacional, el orden público, la salud pública, la tranquilidad social, la seguridad pública o cuando existan informaciones de inteligencia que indiquen que representa un riesgo para la seguridad nacional, el orden público, la seguridad pública, o la tranquilidad social..."." (los decretos no son normas que apruebe el poder legislativo sino normas que "dicta" el poder ejecutivo, es decir se viola la reserva y separación de poderes y se concentra cada vez mas el poder en la rama ejecutiva, una dictadura, en este caso queda que el decreto sea también demandado por inconstitucional).
El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela confirma que Carlos Manuel Pino García es un funcionario de la embajada, sin embargo no tiene inmunidad diplomática, pero tiene su domicilio, su familia radicada en la ciudad de Bogotá hace mas de una década; la esposa de Pino, según los medios de derecha colombiana, no conocía que Pino siguiera trabajando para la embajada venezolana, ella sabia que si trabajó un tiempo pero actualmente pensaba que ya no trabajaba para la embajada, otros políticos de izquierda se pronunciaron diciendo que todo se debía a una confusión porque a Pino lo detuvieron por una infracción de tránsito, que no existía ninguna operación anterior sino que dentro del problema de tránsito se llamó a migración Colombia para confirmar la versión de Pino de ser funcionario de la embajada pero migración dijo que Pino no estaba acreditado como personal diplomático y por ende no tenía inmunidad y que además les acababa de llegar un dossier de inteligencia donde mostraban a Pino como un peligro para la seguridad nacional o mejor dicho un "espía venezolano" por lo que aprovecharon para deportarlo, según migración se le procedió a incautar el celular a Pino, es decir incomunicarlo, impedir que se comunicara con un familiar o un abogado, para proteger la integridad de los funcionarios colombianos que estaban capturándolo, según el director Krüger porque la ley les permite incomunicar a las personas (lo cual es totalmente falso, porque solo se puede capturar a una persona con orden judicial o en flagrancia y siempre se le debe permitir comunicar a un familiar o su abogado la detención, por lo que se hace evidente que se trataba de una operación de mano negra donde el objetivo era incomunicar a Pino, secuestrarlo, desaparecerlo y en la cual participó el director de migración Krüger).
Pino fue luego entregado en el puente internacional a las autoridades venezolanas con la advertencia de no poder ingresar a territorio colombiano por lo menos en 10 años, por lo cual deberá interponer una demanda de nulidad y restablecimiento del derecho contra el acto administrativo del director Krüger y ademas interponer la denuncia penal contra el mismo director y los funcionarios que lo capturaron ilegalmente, teniendo en cuenta que fue el mismo director de migración colombiana el que confirmó la operación de inteligencia ilegal contra Pino, recuerdo ahora el articulo del periódico voz donde dicen que este gobierno tiene una diplomacia de establos, yo diría una diplomacia de porquerizas, nuestros funcionarios son unos cerdos.
En las últimas horas la R.B. de Venezuela confirmó que le ha dado 48 horas al cónsul colombiano en Venezuela, Juan Carlos Pérez, para salir del país, debido a que este tampoco está debidamente acreditado ante el gobierno venezolano: “Ante la arbitraria medida de secuestro y expulsión por parte de las autoridades colombianas del ciudadano venezolano Carlos Pino, funcionario de nuestra Embajada en Bogotá, anunciamos la expulsión de Juan Carlos Pérez Villamizar, funcionario consular colombiano no acreditado”, informó el canciller de la R.B. de Venezuela, Jorge Arreaza.
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